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Wim Mertens, Martirio, Rabih Abou Khalil y Carmen París actuarán en Veruela dentro del XXIII festival Música Viva de la Diputación de Zaragoza

Las composiciones ‘new age’ de Wim Mertens, la copla transgresora de Martirio, la mezcla entre lo árabe y el fado de Rabih Abou Khalil y el mestizaje en torno a la jota de Carmen París sonarán en las próximas semanas en la iglesia cisterciense del monasterio de Veruela dentro del festival Música Viva, el evento con el que la Diputación de Zaragoza dinamiza los veranos de las tierras del Moncayo desde hace ya 23 años. Los conciertos, como siempre en pequeños formatos e intimistas, se celebrarán el 30 de julio y el 6,13 y 20 de agosto. Las entradas costarán 10 euros y se pondrán a la venta desde hoy en la red de cajeros de Ibercaja y en la página web https://entradas.ibercaja.es.

“La génesis del festival Música Viva fue traer a Veruela músicas de todo el planeta y el actual equipo de gobierno de la Diputación de Zaragoza quiere recuperar esa esencia –ha destacado en la presentación del programa la diputada delegada de Cultura, Cristina Palacín–. Por eso esta edición va a marcar un punto de inflexión en esa apuesta por las músicas que no tienen circuitos culturales establecidos”.

Palacín también ha subrayado que, por primera vez en 23 años, el programa de esta edición se ha organizado a través de un concurso público al que se han presentado cinco empresas. “Lo hemos hecho así por el compromiso de este equipo de gobierno con la transparencia y la libre concurrencia, y gracias al concurso hemos conseguido que este año el festival Música Viva tenga cuatro conciertos en lugar de los tres que se solían celebrar hasta ahora”, ha insistido la diputada delegada, quien ha recordado la importancia de este evento como “motor de desarrollo” de las comarcas próximas al Moncayo.

Por su parte, el representante de la empresa ganadora del concurso, Carlos Abadías, ha agradecido a la Diputación de Zaragoza esa apuesta “por la calidad y por salirse de los cauces que marca la dictadura de los mercados”. “El cartel de esta edición del festival Música Viva mezcla a partes iguales la música nacional y la internacional, la de hombres y la de  mujeres, llevando a un escenario tan especial como la iglesia de Veruela a los mejores solistas de muy distintos estilos”, ha destacado Abadías.

El cartel, fecha a fecha

El cartel del festival se abrirá el sábado 30 de julio con Wim Mertens. El compositor belga, considerado uno de los gurús del minimalismo y autor entre otras muchas obras de la banda sonora de ‘El vientre del arquitecto’, presentará su nuevo álbum ‘What are we, locks, to do?`, compuesto solo para piano y voz.

Una semana después, el 6 de agosto, la copla y la osadía de Martirio invadirán Veruela en una actuación que repasará sus 30 años de carrera musical en permanente búsqueda de una forma diferente de cantar, de ser y de estar. La artista onubense estará acompañada a la guitarra por su hijo, Raúl Rodríguez.

El 13 de agosto será el turno del libanés Rabih Abou Khalil, que presentará el disco ‘Hungry people’ tocando el laúd árabe y acompañado de Luciano Biondini al acordeón y del reputado fadista Ricardo Ribeiro. En su concierto, Abou Khalil mezclará la música de oriente medio con la de este lado del Mediterráneo, sobre todo con el fado.

El festival Música Viva de este año se cerrará el 20 de agosto con Carmen París. La creadora e intérprete zaragozana repasará en Veruela su último trabajo, ‘En síntesis’, una recopilación de lo más significativo de sus cuatro álbumes anteriores en la que reúne los múltiples aromas de las músicas y las letras que ha ido creando o adaptando alrededor de la jota.

Todos los conciertos, a las 19.30

Todos los conciertos empezarán a las 19.30 y la apertura de puertas tendrá lugar 30 minutos antes. Para cada actuación se sacarán a la venta 600 entradas, que además de estar disponibles en los cajeros de Ibercaja y en internet podrán adquirirse el mismo día del concierto en las taquillas del monasterio. La media de asistencia de los últimos años alcanza el 85% del aforo, por lo que se recomienda no comprar las entradas a última hora.